Todos sabemos el poder de una buena educación para poder levantar vidas. También debemos creer que todos los niños deben tener acceso a una educación de calidad para garantizar la posibilidad de un buen trabajo con un buen sueldo.
Por desgracia, este sueño se ve cada vez más lejos de convertirse en realidad para muchos estudiantes que viven en comunidades pobres. Las estadísticas siguen mostrando un descenso en el rendimiento académico, que afecta específicamente a los estudiantes de inglés y estudiantes de la clase trabajadora cuyos padres carecen de muchos recursos para satisfacer las necesidades educativas de sus hijos.
Es una situación de doble filo. Algunos distritos ofrecen capacitación mediocres e ineficaces, para los padres descuidando así capacitar a estos con las herramientas necesarias para navegar por un sistema educativo poco familiar e intimidante. Desinformados sobre sus derechos básicos como contribuyentes, que son más a menudo poco probable que buscar los servicios de tutoría públicamente encomendadas y financiados que ayude con la resolución de conflictos, ya sea en el aula, la escuela o del distrito.
Las personas encargadas del sistema de educación tienen la obligación y la responsabilidad de defender el derecho de cada niño a recibir una educación de primera clase. Es derecho constitucional implícito de cada estudiante.
Una vez establecido esto, también es claro que un alto porcentaje de estos niños han pasado sus derechos por alto junto con la educación de las generaciones pasadas.
Como organizadores de la comunidad y defensores de los padres y niños, tenemos nuestro propio trabajo. Es de vital importancia dar a las comunidades que han sido silenciados históricamente una plataforma para hablar. A medida que continuamos convencer a las comunidades la importancia de la recuperación de su poder, Van a empezar a asegurarse de que las personas adecuadas sean elegidos para estar en los puestos de la junta escolar. Estos a su vez, estarán seleccionando superintendentes imparciales y bien entrenados.
Los administradores derecha inspirarán a el profesorado para tener una visión clara y un plan educativo previamente probado. Los verdaderos líderes han demostrado, de antemano, que poseen habilidades y han cumplido con los requisitos necesarios para levantar y mejorar el rendimiento académico de los estudiantes cuyas necesidades y derecho básico a una educación que los prepara para nuevos y mejores trabajos,Que por mucho tiempo han sido insatisfechos.
Graciela de la Torre-Ferrada
As a lifelong community organizer and activist, Graciela Ferrada has been involved in local political campaigns, fundraising, getting the vote out, parent advocacy, and spearheading organizations that provide civic and social justice awareness. She is committed to narrowing the educational gap that has perpetually afflicted the working-class Latino communities as well as promoting social justice.
Her hobbies include, reading, league soccer, dancing, foreign movies. She currently resides in East Whittier, with husband and two adult children, Sebastian and Yasmin.