Conocí a un maestra que intencionalmente reprobaba a todos los estudiantes latinos que tenía en su salón de clases. Ella enseñó matemáticas y ciencia en una escuela preparatoria local en Inland Empire. Por supuesto, que hice lo posible para que fuera despedida. Desafortunadamente, ella no fue despedida y se ganó un retiro después de su deplorable comportamiento con los estudiantes durante más de tres décadas!
Si no puede comprender cómo un estudiante puede obtener solo F’ en una escuela en San Francisco, usted no ha estado prestando atención. Tristemente no es una situación tan rara como a los directivos de la escuela les gustaría que usted creyera.
“Probablemente haya un problema de raíz”, Truitt, jefe de la familia estudiantil y apoyo de la comunidad para el distrito escolar en San Francisco, dijo. “Cuando se habla acerca de un estudiante que está reprobando en cada clase, cada semestre durante años, eso es un caso extremadamente raro y grave.”
¿Lo es?
La raíz del problema es, probablemente, que a nadie le importa un comino que este estudiante interviniera incluso antes de que la situación llegara a este punto! Y no, no es el único! Ha habido otros estudiantes como este en nuestras escuelas — de hecho demasiados. Algunas de estas escuelas simplemente funcionan como si fuera aceptable para deshacerse de estos estudiantes.
Obtener solo F’ en todas las clases en la escuela preparatoria es una cosa, pero es igual de malo darle a los estudiantes buenos grados cuando en realidad no dominan la materia. No puedo decirle cuántos estudiantes se han graduado de sus escuelas preparatorias pensando que estaban en la parte superior del 20 por ciento de la clase y luego salen al mundo real, sólo para hacer un mal desempeño en las pruebas a nivel de colegios comunitarios. Estos estudiantes terminan requiriendo varios años de remisión con el fin de asistir a un colegio comunitario.
Todo esto es criminal. Seguido digo, que creo que toda una generación de estudiantes tiene el motivo de una demanda colectiva contra el Departamento de Educación de California. Espero sinceramente que los padres comienzan a involucrarse más para responsabilizar a las escuelas y a los maestros.
No podemos permitir que este tipo de injusticia continúen en nuestras escuelas.