Siempre he cuestionado si el colegio es el camino exclusivo, para una carrera exitosa. La respuesta depende completamente de cómo un individuo define el éxito. Lo que también es de conocimiento común es que el éxito siempre se obtiene al obtener conocimiento; aquellos que tienen éxito, suelen ser bien educados. Tendemos a conectar automáticamente, la educación con el colegio, por lo que les decimos a nuestros hijos que deben asistir al colegio para tener carreras exitosas. Pasamos por alto, el hecho de que algunas de las personas más exitosas de nuestra generación actual, no recibieron una educación institucionalizada. Esto no debería ser una sorpresa, porque somos conscientes de que el conocimiento y la educación, no se limitan a las paredes de una aula universitaria.
Aún así, me quedé pensando en el camino hacia una carrera exitosa, y, recientemente, pude vislumbrar el significado del verdadero éxito en una conversación que tuve con mi alumna. Actualmente soy educador en una escuela preparatoria para el colegio. Como escuela, tenemos la expectativa de que cada estudiante solicite, sea admitido y se gradúe de un colegio. El problema con esta expectativa, radica, en el hecho de que no todos nuestros estudiantes, consideran que el colegio sea necesaria para su carrera. Mi estudiante, una mujer joven, con el sueño de abrir su propio salón de belleza, sabe que ir al colegio no le brindará mucho apoyo. En su lugar, ella se está aplicando a la escuela de cosmetología, donde aprenderá los conceptos básicos de la cosmetología con el fin de establecer su negocio.
En este punto, el lector observador sugerirá que ir al colegio puede proporcionar a mi estudiante, la educación empresarial necesaria para abrir y mantener su salón de belleza. Aunque ésta es una gran observación, ella tiene un plan alternativo. Ella se asociará con su buena amiga, que ya posee, y opera un negocio exitoso. Mi estudiante aprenderá el lado comercial de administrar un negocio de su amiga, por lo que no necesita, asistir al colegio para obtener ese conocimiento. Mi estudiante presentó un plan elaborado para su futura carrera y me sorprendió, el hecho de que no mencionó, al menos por un momento, el colegio.
Mi estudiante define el éxito cómo, encontrar su pasión y seguirla hasta que se realice plenamente. Ella es una apasionada de la cosmetología, por lo que dedicará su vida al arte de la preparación. A veces, nuestras pasiones no requieren un título universitario para ser validados. Algunos estudiantes, quieren dedicar sus vidas a la cocina, otros a la construcción y reparación de automóviles, otros a la construcción de viviendas. Es una pasión, y la falta de estudios universitarios, no hacen que nuestros hombres y mujeres jóvenes sean menos aptos para tener éxito. El colegio no es más que un camino, hacia una carrera exitosa, pero el camino más recto, siempre será recorrido, cuando persigamos nuestra pasión.