Estoy tratando de ponerme en los zapatos de los miembros de la junta escolar en un intento de razonar, con las decisiones que toman específicamente cuando se trata de escuelas públicas chárter. Los consejos escolares en mi comunidad, pueden sentirse presionados por el sindicato porque canalizan dinero hacia sus campañas. Pero sus decisiones al final del día, afectan a nuestros estudiantes y sus posibilidades de ser exitosos cuando llegan al nivel universitario.
La Asociación de Maestros de California ha estado haciendo mucho ruido con sus publicidades en la radio y sus anuncios, diciendo, que muchos funcionarios públicos que apoyan las escuelas chárter, están corrompidos por millonarios y que los millonarios se están beneficiando de nuestras escuelas. Pero podríamos discutir el otro lado de las cosas; hay un gran interés en los sindicatos de maestros cuando financian a funcionarios públicos y sus campañas. ¿Por qué esto no se considera corrupción también?
Esta es mi perspectiva como padre: Muchos padres han buscado educación de alta calidad, y la han encontrado en muchas escuelas públicas chárter de la comunidad que de hecho enseñarán y prepararán a los estudiantes. Pero los sindicatos nunca se han detenido para preguntarnos a los padres por qué hemos tomado esa decisión para nuestros estudiantes y por qué, elegimos y seguimos escogiendo escuelas chárter públicas y no escuelas públicas tradicionales.
La información que la unión necesita para entender el porqué, escogemos escuelas públicas chárter está en nosotros los padres y en la comunidad.
Los Gatos y Cupertino, son dos distritos en San José, que son muy ricos y no necesitan escuelas chárter en su comunidad, porque sus estudiantes reciben educación de alta calidad, en comparación con los distritos que están a sólo unas millas de distancia, como mi comunidad, East Side San José.
Soy un padre y votante del Distrito Alum Rock, que no ve el mismo éxito en East Side SJ, como lo veo en Los Gatos. Si las chárters públicas están trayendo lo que es necesario y necesitado aquí, las familias felizmente aceptarían eso, sobre nuestras escuelas tradicionales que han estado fallando a nuestros estudiantes durante décadas, y han estado gastando nuestro dinero de impuestos sólo, para fallar a nuestros estudiantes y familias una y otra vez.
Los límites de los códigos postales son lo que separa a las escuelas de alto rendimiento, de las escuelas de bajo rendimiento en la hermosa ciudad de San José; las escuelas chárter no tienen este límite y, de hecho, están abiertas para cualquiera que desee postularse. Esta es la razón exacta, por la que se consideran una opción diferente, una elección.
Como padre, francamente no me importa quién se está llevando que dinero, lo que más me importa es que mis hijos reciban una educación de clase mundial, y estén preparados para la universidad y para la vida. Lo que mi comunidad necesita, es gente interesada en elevar a nuestra gente.
El dinero siempre es parte de esta conversación, pero al final del día, ese dinero pertenece a mis hijos, porque pago mi parte justa de impuestos. No estoy en contra de los maestros o la unión. De hecho, estoy de acuerdo en que a todos los maestros se les debe pagar por su arduo trabajo, y dedicación de manera justa. Lo que necesito es que los maestros respondan a las necesidades de la comunidad a la que sirven. Si continuamos agregando dinero a las pensiones, pero no hacemos responsables a los maestros de mi comunidad, entonces nuestro sistema nunca mejorará, y continuaremos luchando por mejores opciones.
Yo hice una invitación a todos los padres para que se informen de la calidad de la enseñanza que sus hijos están recibiendo. ¿Es eso lo que necesitan para alcanzar sus metas y realizar sus sueños?
Me gustaría invitar a todos los padres a que se informen sobre la calidad de la educación que recibe su hijo. ¿Está recibiendo la educación que necesita su hijo/hija, para alcanzar sus objetivos y realizar sus sueños?
Heriberto Soto
Heriberto has been a parent leader and advocate for KIPP Bay Area Schools (Knowledge is Power Program) and Rocketship Public Schools and actively advocates for high quality choice in East Side San Jose and other underserved communities where schools are not preparing students to learn and be successful citizens of the world.
He wants to make sure that his children and other children in his community are not limited to opportunities to compete with the fast paced technological world we live in. He truly believes both KIPP and Rocketship are doing just that, opening up opportunities to children in East Side San Jose that they otherwise wouldn’t be able to attain.
“Every child can learn, you just have to give them the opportunity to do so.”