Una de las dificultades de ser un estudiante universitario de primera generación de una comunidad latina es tener el coraje para ir a la universidad fuera del estado. Tener el coraje para dejar a su comunidad y su familia en busca de mejores oportunidades no es una tarea fácil. La idea de dejar su ciudad natal y su familia es aterradora. Especialmente creo es más difícil cuando eres mujer y el mayor de los hijos de tu familia. A pesar de todo, Madeline Aguirre, estudiante de segundo año en la Universidad George Washington, pudo ganarse la confianza y la valentía para dejar Pico Rivera, California y comenzar su viaje profesional y académico en Washington DC
Madeline Aguirre ingresará a su segundo año en la universidad The George Washington este otoño con una especialización en asuntos internacionales con una concentración en economía internacional y una especialización en negocios. Después de graduarse de la Universidad George Washington, Madeline espera ingresar a un programa de Doctorado y MBA (Maestría en Administración de Empresas) o trabajar para The World Bank.
Asistir a la universidad fuera del estado le ha brindado una amplia gama de oportunidades y experiencias en las que no habría podido participar si no asistiera a la universidad en Washington DC. Este verano tuvo la oportunidad de hacer una actividad con las Girl Scouts Nation’s capital en la Universidad George Washington, Madeline puede formar parte del Instituto de Liderazgo Hispano de Cisneros. Además, Madeline tuvo la oportunidad de escuchar al presidente de Francia, Emmanuel Macron, hablar en su campus. No solo escuchó al presidente Macron, sino que tuvo la oportunidad de conocer a Eric Garcetti, el alcalde de Los Ángeles y muchos otros líderes mundiales.
Madeline Aguirre es un perfecto ejemplo de por qué los estudiantes de primera generación no deben temer ir a universidad fuera del estado. Muchos estudiantes de primera generación deben seguir su ejemplo y dejar California para sus viajes de educación superior.