“¿Puedo tener cinco minutos más? ”. Esta pregunta es formulada por innumerables niños en todo el mundo. Francamente, es probable que muchos adultos también lo pidan. Muchos de nosotros no somos los llamados “personas de la mañana” y, tampoco muchos de nuestros hijos. Sin embargo, lo que nuestros niños hacen y no hacen en la mañana, puede tener un impacto significativo en su aprendizaje y bienestar general. Personalmente, he sido testigo de cómo muchos estudiantes increíblemente inteligentes, tienen un comienzo lento en la mañana. Esto me hizo preguntarme: ¿estamos preparando a nuestros alumnos para que tengan éxito en el aula por lo que hacen los alumnos después de despertarse? Tomando inspiración del libro Aubrey Marcus ‘ Own the Day, Own Your Life’, a continuación se incluye una lista de lo que hay que hacer, y no hacer para asegurarse de que nuestros hijos estén despiertos, energizados y listos para aprender cuando suene la campana de la mañana.
- Agua
Se estima que perdemos alrededor de una libra de agua cada noche mientras dormimos. Esto ocurre a través del vapor de agua que inhalamos y exhalamos durante nuestras horas de sueño. Además, muchos de nosotros enterramos a nuestros hijos bajo múltiples cobijas y, por lo tanto, nuestros hijos pierden un poco de agua a través del sudor. Esto se suma a que nuestros hijos (y nosotros mismos), nos despertemos deshidratados, pero culpamos a estar cansados, a no dormir bien, o simplemente, a afirmar que no somos una “persona de la mañana”, cuando lo que realmente necesitamos es agua y toneladas de ella.
Sin embargo, no solo perdemos agua a través del sudor y la respiración en la noche, también perdemos los minerales clave. Aubrey Marcus, CEO de la compañía de salud y bienestar Onnit, sugiere comenzar cada mañana con un cóctel de minerales. El mezcla agua, sal marina (la rosada del Himalaya es la mejor), y, un poco de limón cada mañana. Personalmente he estado bebiendo esto cada mañana durante más de un año, y no solo te hidrata, sino que también sabe delicioso. Ya sea mantener una botella de agua junto a la cama de su hijo, verter agua en lugar de jugo azucarado para el desayuno, o, disfrutar de un cóctel mineral en la mañana, debemos hidratar a nuestros niños para que lleguen a la escuela listos para aprender.
- Haga Su Cama
Almirante de la Marina de los Estados Unidos, orador público, y autor William H. McRaven, dice que si desea cambiar el mundo, comience por hacer su cama. Este hábito, afirma, es de suma importancia, porque garantiza que completamos la primera tarea del día. En otras palabras, nos damos una mini victoria, a primera hora de la mañana. Esto también enfatizará la disciplina, la consistencia, y el hecho de que las cosas pequeñas en la vida, son importantes. Esta pequeña tarea puede usarse como una valiosa lección de vida para nuestros hijos. Recomiendo hacer sus camas junto con su hijo, porque después de todo, debemos practicar lo que predicamos.
- ¡Muévanse!
Al escribir su libro “What the Most Successful People Do Before Breakfast” (“Lo que Hacen las Personas Más Exitosas Antes del Desayuno”), Laura Vanderkam, encuestó a innumerables líderes notables en sus respectivos campos, sobre lo que hacen antes del desayuno. Encontró que estas personas realizan algún tipo de actividad física, antes de desayunar. Esto no solo tiene beneficios físicos, sino que también ayuda a impulsar las capacidades cognitivas de nuestros hijos. Si tienes una mascota, esto también podría significar correr persiguiendo al gato de la casa, o sacar al perro a caminar 10 minutos. El famoso autor y podcaster Tim Ferris, sugiere hacer 25 de algo cada mañana, después de despertarse. Esto podría ser algo tan simple, como hacer saltos con sus hijos o, rebotar en la cama 25 veces.
- ¡No Más Cereales Azucarados!
Estudios recientes de UCLA afirman que las dietas altas en azúcar, afectan negativamente la memoria y el aprendizaje. Sin embargo, continuamente damos a nuestros hijos cereales llenos de nada más que azúcar. Según The Daily Meal, la mayoría de los cereales que comen nuestros niños, tienen tanta azúcar como dulces. De hecho, Cap’n Cruch y Fruit Loops están compuestos de casi un 50% de azúcar. En cambio, alimentemos a nuestros hijos con grasas buenas, como huevos y aguacates, combinados con alimentos ricos en fibra, como avena, frutas y verduras. Esto puede parecer sentido común, pero piense lo que comieron sus hijos esta mañana.
- Luz del sol
Damos por sentado la luz del sol. Exponer nuestros cuerpos a la luz del sol por la mañana, pone en marcha nuestros ritmos circadianos (que son como nuestro reloj interno). Cuando recibimos luz solar directa en la mañana, le indicamos a nuestro cuerpo y cerebro, que es hora de despertar. Por lo tanto, le recomiendo encarecidamente a caminar a su hijo a la escuela, si es logísticamente posible. No solo obtendrá una hermosa exposición al sol, sino que también cosechará los beneficios del movimiento físico en la mañana, mientras disfruta de un tiempo de unión con su hijo(s) o hija(s).
Como educador, la pregunta más común que me hacen los padres, es cómo pueden ayudar a sus hijos a aprender. Sin embargo, antes de que ocurra cualquier aprendizaje en el aula, nuestros niños deben venir a la escuela listos para aprender, y lo que hagamos, o no hagamos en la mañana, puede tener el mayor impacto. Espero que mañana por la mañana se despierte, y le sirva un poco de agua a su hijo, hagan las camas juntos, realicen algún movimiento físico, coman un desayuno bajo en azúcar, y reciban algo de luz solar, en camino a la escuela.