Es Hora Que los Padres, Estudiantes y Maestros Sustitutos Creen Sus Propios Sindicatos Laborales

Ayn Rand, comienza su clásico libro Anthem con “es un pecado escribir esto”. “Es un pecado en pensar palabras que otros no piensan, y ponerlas en un papel que otros no deben ver”. Ayn Rand, no era ni progresista ni conservadora con definiciones estrictas. Era una poderosa filósofa rusa, judía y femenina, sobre la que los estudiantes deberían leer y debatir en clase, para crear pensadores críticos de por vida.   

En el espíritu de Ayn Rand, sería verdaderamente un pecado escribir, para que nadie leyera las palabras. Además, en la lucha de nosotros – Ayn Rand diría que el nombre y la independencia del individuo pueden perderse. Por lo tanto, es imperativo centrarse en la situación específica de maestros sustitutos, padres y estudiantes, quienes muchas veces, no están incluidos en el nosotros.

Ayn Rand aboga para que las personas sean reconocidas en la sociedad. A través de la filosofía de Rand, ella señala que ciertos derechos individuales se pierden y, que un enfoque de nosotros, se debe adoptar que incluya a todos. No sólo unos pocos seleccionados que se benefician. ¿Qué hay de las personas pequeñas que hacen el trabajo gruñón? Las propias palabras de Ayn Rand.

La verdad es que los maestros sustitutos son los trabajadores migrantes modernos de la educación pública. Las Yalitzas del mundo de la película Roma: los silenciosos, los invisibles del mundo. Muchos padres y estudiantes también sienten que son invisibles y no están incluidos en las decisiones del distrito escolar.

Se debe crear un sindicato que represente a los padres y estudiantes.

Muchos de los grupos de padres / estudiantes sin fines de lucro, no se toman lo suficientemente en serio, pero un sindicato lo sería, ya que podría tener un poder legal de negociación laboral.

Se creó con éxito un sindicato de trabajadores sustitutos en Pasadena y los sustitutos recibieron algunos beneficios y una tasa de pago decente. Estos sustitutos tomaron el enfoque de nosotros y no el enfoque de yo. Tomó mucho trabajo de organización pero tuvieron éxito.

También es importante señalar que The LA Times, usó los términos inexactos de maestros sustitutos “extravagantemente” pagados y “bien pagados” durante la reciente cobertura de noticias de huelga del LAUSD. Los sustitutos fueron pagados $42/ hora durante la huelga. Guau. Sólo por seis días. Eso es aproximadamente $252 por día y, si usted resta impuestos y otras deducciones de nómina, es mucho menos. Eso apenas paga un mes de alquiler y tal vez algo de comida.

La tarifa que reciben los maestros sustitutos a diario, es mucho menos y muchos están en espera y no les toca trabajar todos los días. Para poner las cosas en perspectiva, incluso si a alguien le pagan $100 por hora, y si sólo trabajan cinco horas en un mes, sus ganancias son de $500 en un mes. ¡Eso es salario de pobreza! Así que los $42/ hora se promocionaron erróneamente como un pago extravagante.

Hubiera sido bueno si los Maestros Unidos de Los Ángeles (UTLA), hubieran exigido que la tasa de pago se mantuviera en $42. Eso hubiera sido revolucionario.

En pocas palabras, los ingresos sustitutos son salarios de pobreza comparables a los salarios promedio de Walmart y McDonald.

Pero la pregunta fundamental es: ¿cuál es el pago regular de los sustitutos, qué beneficios tienen actualmente, y se negoció algo para mejorar sus necesidades y dificultades únicas?

Los maestros sustitutos son necesarios tanto para los administradores, como para los maestros. Es conveniente la mano de obra barata. ¿Y cómo son tratados los sustitutos? Como los trabajadores migrantes que son invisibles e dispensable.

Los United Teachers of Los Angeles (UTLA) deben hacer un mejor trabajo representando y organizando sustitutos.

¿Cuál es la regla de oro en la organización comunitaria? Identificar el interés propio y los problemas comunes que unifican y movilizan a la comunidad. La identificación de un “objetivo enemigo” común también ayuda a movilizar / inspirar a los partidarios. UTLA se dirigió específicamente al superintendente Beutner y al presidente de la junta directiva de LAUSD, Mónica García.

A veces, las estrategias de organización no incluyen necesariamente las necesidades específicas de las personas que trabajan en burocracias estructuradas en estructuras de tipo militar de arriba hacia abajo. Las personas que trabajan en estas burocracias monumentales comienzan a ser percibidas como robots, sin emociones ni necesidades humanas.

Sólo mire la reciente situación de cierre de trabajadores federales, los trabajadores con contrato federal en los peldaños más bajos de la burocracia, no recibirán pagos atrasados. Las personas que brindan seguridad, limpian los edificios y, realizan otros trabajos agotadores. Se les percibe como trabajadores prescindibles y de bajos salarios, sin ningún tipo de protección de la legislación laboral.

La educación pública se estableció en una burocracia jerárquica, de arriba hacia abajo, donde se dan órdenes y reglas, y se deben seguir. Han pasado siglos, pero esta estructura continúa hasta este día.

Basta con visitar una escuela pública y ver cómo está estructurada. El director y los subdirectores están arriba. El resto del personal de apoyo generalmente se queda fuera de las conversaciones / ecuaciones. La asistencia se toma y se presenta para obtener el Promedio de Fondos de Asistencia Diaria (ADA).

Intenta cambiar una burocracia centenaria.

El punto aquí es que, los maestros sustitutos son necesarios, pero no reciben la compensación que viene con la gran responsabilidad de estar en el aula. Muchos educadores de adultos, administradores y algunos estudiantes pueden ver a los sustitutos como subhumanos y a muchos sustitutos se les ignora y se les falta al respeto a diario, ya que son percibidos como trabajadores a tiempo parcial, y trabajadores migrantes de baja remuneración.

Un comienzo sería, si el título de sub, sería cambiado, ya que es un término estigmatizado negativamente. Maestro suplente debe ser cambiado oficialmente a maestro invitado.

Puede que no parezca una gran cosa, pero sería un comienzo para ayudar a humanizar y mostrar respeto hacia los sustitutos. Perdóneme, pero el maestro invitado suena mucho mejor.

Si crees que la enseñanza sustituta es fácil, pruébala durante una o dos semanas. Continuamente.Después, haga un blog sobre esto o, publique sus experiencias en Facebook, Twitter, Instagram o cree un blog. Ya no será una parodia de Hollywood, sino una verificación de la realidad.

A todos les gusta hablar de educación pública como si fueran expertos en el tema, pero ¿quiénes son los adultos que más asisten a clase diariamente? Maestros y maestros sustitutos.

Sí, los maestros sustitutos externos (muchos de ellos a través de agencias temporales), fueron contratados para trabajar durante la huelga del LAUSD, pero la mayoría de los maestros sustitutos del LAUSD apoyaron la huelga y no cruzaron la línea y, no recibieron ningún pago por seis días. Imagínese si la huelga hubiera durado más, al igual que el congelamiento del trabajo del gobierno federal. Las consecuencias habrían sido verdaderamente devastadoras.

Ahora, como sociedad, debemos preguntarnos, ¿ayudaremos a empoderar a todos, o sólo a nuestros propios intereses? Si realmente queremos mejorar la educación pública – Comencemos con las personas que se sacrifican a través del compromiso y valentía, para estar en algunos de los salones más difíciles – maestros y maestros sustitutos.

En última instancia, los maestros sustitutos deben organizar y establecer su propio sindicato laboral en todo el estado: United Substitute Teachers of California. Eso sería verdaderamente revolucionario seguir los pasos y el ejemplo de César Chávez y Dolores Huerta, a través de la creación de United Farm Workers (UFW).

Después, para agitar aún más las cosas, se debe crear un sindicato de padres / estudiantes en todo el estado, para realmente convertirnos en parte del movimiento social, nosotros.

¡Maestros sustitutos, padres y estudiantes de California, únanse!

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Randy Jurado Ertll

Randy Jurado Ertll

Randy Jurado Ertll, attended some of the toughest public schools within Los Angeles Unified School District (LAUSD). He and his family moved dozens of times throughout Los Angeles. He attended Menlo Avenue Elementary School – which he loved dearly as a child – even though violence was an everyday occurrence in the surrounding community. He survived James A. Foshay Junior High School in the mid 1980’s. As a child, he escaped a rural Civil War in El Salvador, and while in Los Angeles, he escaped an urban Civil War (taking place in South Central Los Angeles) by being accepted into the A Better Chance-ABC scholarship program by going far way to study at John Marshall High School in Rochester, Minnesota. Hella cold. He returned to his community by applying and being accepted into Occidental College where he was indoctrinated to become a social justice activist, reader, writer, free thinker, and free, rebel, spirit.

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