Desde las múltiples huelgas de maestros en todo el país, hasta informes que demuestran que nuestros estudiantes se están atrasando en sus logros, está claro que, este, ha sido un gran año para la educación en los Estados Unidos. El Center for American Progress, publicó un nuevo informe que describe los mayores desafíos que enfrenta la educación K-12 en los EEUU., además de las prioridades que deben tomarse para abordarlos. Este informe se publicó en el momento perfecto, ya que los candidatos presidenciales están subiendo al escenario y esbozando sus prioridades políticas. El informe también aborda las disparidades entre estudiantes blancos y no blancos, y como la raza está profundamente conectada a muchas de las desigualdades educativas mencionadas, tenemos que centrar la conversación en torno a esto. Como maestra, gran parte de los datos señalados en el informe, sólo afianzan las inequidades que he intentado interrumpir dentro de mi propia aula. Los educadores de todo el país están observando y esperando las conversaciones importantes, que aún tienen lugar en el escenario nacional, es decir, el estado de la educación pública K-12 en nuestro país.
Los políticos a nivel estatal, así como muchos candidatos presidenciales, han mencionado la educación de la primera infancia, o la educación superior, una prioridad para los presupuestos de educación. Ambas prioridades estarían dando excelentes pasos hacia resultados educativos sólidos para los estudiantes, pero el hecho es que, la mayoría de la educación de un niño ocurre durante los años K-12.
El nuevo informe, Una Educación de Calidad para Todos los Niños por sus siglas en inglés, A Quality Education for Every Child, declaró que “a medida que se acercan las elecciones de 2020, la conversación sobre cómo cambiar la dirección del país ganará aún más protagonismo … los candidatos a cargos nacionales, presentan ideas sobre cómo aumentar el acceso a la educación infantil de alta calidad y cómo hacer que la educación superior sea más accesible y asequible. Y, sin embargo, con algunas excepciones prominentes, los candidatos presidenciales, aún no han tomado posiciones claras, ni han apostado grandes ideas sobre cómo garantizar que todos los niños tengan una excelente escuela”.
Las huelgas de maestros en Los Ángeles, Oakland y otras ciudades del país, han tenido éxito y han dejado en claro que los maestros de los Estados Unidos, están llamando la atención sobre las condiciones que hacen que sea difícil lograr resultados educativos sólidos para los estudiantes. El informe citó además que … “las recientes huelgas y paros de los maestros salieron a la luz, los maestros de escuelas públicas, ganan menos que otros profesionales similares en todos los estados; en 2018, ganaron 13.1 por ciento menos en promedio, cuando se contabilizaron los beneficios no salariales”. Mientras los salarios de los maestros fueron sólo una de las razones por las que los maestros decidieron hacer huelga en los últimos meses, definitivamente fue un área que recibió mucha atención de los medios. Un puñado de candidatos presidenciales, han discutido los salarios de los maestros pero no con gran detalle. La compensación para los maestros es una conversación que debe ocurrir.
El informe abordó la necesidad de centrarse en las inequidades al hacer que la raza sea un lente crítico dentro de las políticas educativas, preparar a todos los estudiantes para la educación superior, aumentar nuestra inversión en escuelas públicas, entre otros.
Los educadores y las familias, los estudiantes y los líderes comunitarios, han demostrado su poder político con las huelgas y manifestaciones masivas, para apoyar la prioridad de la educación pública en este país. No tengo ninguna duda de que el mismo poder político entrará en las elecciones de 2020 y, tendrá un impacto significativo, en los resultados en las urnas. Es hora de que los políticos actúen según las prioridades de acuerdo con las acciones descritas en este informe. El informe solicita que reconozcamos las desigualdades raciales que existen entre los estudiantes blancos y no blancos y, formamos políticas para interrumpirlo a través de este lente. No podemos simplemente ignorar, que existe una “brecha de $23 mil millones en fondos entre distritos escolares predominantemente blancos y predominantemente no blancos”. Necesitamos solucionar esto con el sentido de urgencia que merece, en lugar de intercambiar términos como “salarios de maestros” “logros estudiantiles” y otra jerga educativa como la esperanza de ganar fuerza a medida que comienza la temporada de elecciones. Es hora de que todos nosotros actuemos en estos temas, hemos tenido suficiente discusión.
Daniela Felix
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