Mi Hija de Escuela Secundaria, es Una Alumna Dotada de Honor, que se Preparó para la Escuela Secundaria.
Ella tomó dos pruebas diferentes. Una, para la colocación de idiomas, y otra para la colocación de matemáticas. Pensó en sus asignaturas optativas, discutió, cuál era la mejor para su futuro académico, y también tomó notas sobre lo que estaban haciendo sus amigos. Asistió a las orientaciones y, me animó a ir a las clases de información.
Supongo que muchos niños simplemente pasan al siguiente paso, pero no ella. Le gusta sacar buenas notas, le encanta recibir asistencia perfecta.
Ella había estado discutiendo un programa llamado Club TC, donde se queda después de la escuela, y participa en deportes, cocina, o jardinería. Ella tenía miedo de que yo no la dejara ir, porque eso significaba que pasaría largas horas en la escuela. Finalmente, le había dicho que estaría bien.
“La escuela está a sólo 5 minutos caminando de aquí”.
Esas fueron las palabras que use para finalmente, acceder a que se uniera.
Y después recibimos un aviso de 30 días para desalojar, en la puerta de nuestro apartamento.
Nuestro complejo de apartamentos había sido vendido, y los nuevos propietarios se rescindieron del contrato que el propietario anterior y yo teníamos.
Necesitábamos
Mis vecinos y yo enfrentamos la misma pregunta. ¿Dónde?
13 estudiantes que tenían planes académicos para el próximo año escolar, fueron desplazados. Uno era un estudiante en su último año en la escuela preparatoria. ¿Cómo puede un movimiento brusco, no afectar la educación de su hijo?
Hay más niños en edad escolar, que recibirán sus avisos en momentos aún peores, como a mediados del semestre.
Los nuevos propietarios están remodelando y aumentando los alquileres, y los inquilinos actuales, están en el camino.
¿Seguirán prosperando nuestros hijos como estudiantes? Sí, por supuesto.
¿Sería más fácil para ellos si no hubieran sido desplazados? Absolutamente.